Ahora sí no se que escribir

Mientras camino por las calles en dirección a algún compromiso, medito y se me vienen a la mente mil cosas que compartir en este espacio. Pero al final del día, si tengo la oportunidad de sentarme frente a mi lap y una conexión a Internet simplemente esas fabulosas ideas volaron de su jaula. Cosa que ahora encuentro terrible, ya que la disciplina me obliga escribir que no se que deba ser.

Así que limitaré a lo básico: lo hecho.

He estado trabajando en la ULM. Ya terminamos con el gateway y con el servidor de correo electrónico. Ha sido una frustración tras otra intentar mejorar mis instalaciones de qmail-ldap: intenté hacer un paquete Debian: fracaso; intenté instalar una interfaz para manejar esto: fracaso. Y por la premura de los tiempos de entrega hube de regresar a lo que ya se hacer. Es una pena no poder ir más allá de lo habitual.

Ahora estamos trabajando en un tipo hotspot o gateway inalámbrico, de la manera como lo acostumbran los Sanborns con el Infinitum: una redirección automática a una página de autenticación. Ya autentica con un LDAP y un PDC. Queda afinar detalles.

Ayer fui a comer con una amiga, y luego vimos la película de Zathura. Es Jumanji una y otra vez. ¡Qué aburrido! Después al café y luego a jugar póker con otros amigos hasta las 2am. Como se ha vuelto una tradición, terminé desfalcado.

En mi lectura voy lento. Me resulta imposible leer en la casa de mis papás sino hasta muy entrada la noche. Pero el libro esta interesante: Introducción a la Ética, de Gutierrez Saenz, sí ese que llevamos en la prepa. Toca temas cruciales: libertad, decisiones, etc. Pero para libros de filosofía me sigo quedando con el de Introducción al existencialismo de Nicola Abbagnano, que, dicho sea de paso, ha sido el libro más complicado que he leído.

¡Ah! ya me acordé qué quería platicarles, pero será para la siguiente ocasión...