27 December, 6:43pm

¡Increíble! Este blog ayer cumplió seis años de existencia. No sé qué pensar. Seis años son muchos años. Todo comenzó en unas vacaciones navideñas en mi primer año de maestría y continúa. Debo confesar que siento miedo de sacar estadísticas de él. Quisiera saber cuántas entradas hay, cuántas palabras, cuántos poemas, cuántos... pero prefiero no saberlo, no ahora. Hay lo que hay y debería estar contento con ello.

Pero las comparaciones no se escapan: los niños que nacieron justo cuando comencé este blog ahora van a la primaria, aprendieron a hablar, aprendieron a andar erguidos, experimentaron una pléyade de emociones abismales, hubo momentos que lo han marcado para el resto de su vida... ¿esos seis años habrán sido igualmente de intensos para mi? ¿habré crecido de manera equivalente que eso niños?

Lo dudo. Sin embargo el periplo no ha sido menor: estaba en Cuernavaca en el 2004, a finales del 2005 me gradué de la maestría y pasé unos meses entre Irapuato y Celaya. A mediados del 2006 me mudé a Monterrey. 2008, Coruña. No, estos años no han sido friolera, pero tampoco pueden compararse con los primeros seis años de vida de un humano.

Me doy cuenta de otra cosa: me entero más de lo que hice en el año a través de mis actualizaciones en Facebook que en el blog. Tal vez debería revertir esa tendencia: anotar más en el blog y dejar que en Facebook sólo se agregue esa información.

Ahora la revisión de propósitos. No los publiqué a inicio de año en esta ocasión, sólo los apunté mi lista de to-do en org-mode de Emacs y ahora los desvelo:

Leer 20 libros
Nada, llegué a trece. Y si pudiera elegir los tres más importantes de este año (emulando a Enrique Peña Nieto), serían Tratado de ateología de Michel Onfray, La doctrina del shock de Naomi Klein y Los señores del narco de Anabel Hernández. Pero me siento contento con estos trece leídos. Me da confianza para regresar a la senda de los 20 libros anuales.
Escribir 1 cuento largo y 100 blog posts combinados
Pues este año escribí un par de poemas (o hasta tres), ¡un cuento! y 46 entradas en el blog. Yo daría por cumplido, a carta cabal, este propósito.
Hacer un viaje loco
Hice uno: estar una semana en Nueva York y luego dos meses en México, tele-trabajando. Lo de tele-trabajar no resultó ser la experiencia que yo esperaba, ni mucho menos salieron los resultados deseados. Pero cabe dentro de la definición de viaje loco.
Mudarme fuera de España
Nada. Un propósito muy tonto ahora que lo veo en retrospectiva. Este lo deshecho sin más.
Nacionalidad española
¡Uff!... un ítem pendiente. Muy pendiente. Y aún me sigue dando revolcadas mentales y hasta un miedo irracional que no termino de entender.
¡Más ejercicio! (disciplina)
Nada. Una vergüenza. Empezando por el ejercicio y continuando hasta la disciplina en general.
Tener commits en el kernel
Seguí con más detenimiento las listas relativas a la arquitectura ARM, hablé con desarrolladores del kernel, mandé un par de correos a la lista. Envié un parche muy imbécil que fue rechazado al instante por Russell King.
Diversificar inversiones
¿Inversiones? ¿Cuáles inversiones? Ya soy un chico Triodos, casi por completo.

Ahora a pensar en los propósitos del 2012... y sacar las conclusiones de este año, que serán tema de otro blog post, pero que no son nada halagüeñas.