mi blag

Después de que se cayó el cielo el pasado 24 de febrero, cuando hubo una precipitación récord para el mes de febrero desde que hay registros, se inundó la finca y los perros llenaron de barro toda la casa, hoy ha sido un día espectacularmente soleado y tibio.

También hoy, a falta de una última revisión por parte de Dores, creo que terminé de escribir el cuento de Tezcatlipoca. Tres reescrituras. Mucha bibliografía. Pensar la historia interminablemente. Fatigado de buscar las palabras, oraciones y párrafos adecuados. Quería escribir dos cuentos. Solamente escribí uno y comencé la lenta reescritura de otro anterior. Esta excedencia como escritor a tiempo completo ha sido una bonita y aleccionadora experiencia. Volvemos a la escritura a tiempo parcial.