Yépez y Remarque

Yépez

Desde hace tiempo sigo a Heriberto Yépez por twitter. Comencé a seguirlo después de que el sitio web de la editorial Verso publicaran dos poemas de él. Quedé impresionado de que Verso hiciera eco de su trabajo.

Como dice el blog de Verso Books, Heriberto es provocador. Sus tweets, o te dejan frío o infunden ira. El medio camino es territorio yermo. En muchas ocasiones he estado a un dedo de desfollowearlo.

Así, cuando estuve por México, más concretamente, en San Luís Potosí, curioseando en la biblioteca del Museo Leonora Carrington, me topé con este poemario suyo. El segundo que publicó en su carrera profesional: El órgano de la risa.

No puedo decir que me gustó. Tampoco lo aborrecí. Me dejó, más bien, atónito. Su estilo vanguardista, jugando con los signos; empleando aliteraciones, intentando ser chistosas sin lograrlo.

El poema que más me gustó fue "Canto del Transmaíz", del cual transcribo un extracto:

I. (ENTRADA POR ESCALINATA)

Disculpando el desusado vocativo,
Mexicanos,
mala suerte nos vino encima,
¡fueron los cometas! (tales fueron los augurios),
¡Mal azar sufrimos!

pues por poco (culpabilísimos estos españoles intermedios)
por poquísimo (cuestión de añitos)
y por poco y éramos aztecas.

Casi casi, ya merito

en estas persistentes escaleras
hubiéramos podido decir (en lugar de tomar fotos
o adquirir inciensos):

¡estas pirámides son nuestras!

II. (TZOMPANTLI DE PLÁSTICO)

Somos
el país del maíz
transgénico. Esta cacotableta
sucinta es un registro: los lúcidos supimos
que éramos
las últimas caquimias.
Atravesábamos
(lo supimos) (una puerta que no era una puerta)
la noche enjuta; era árida piedra la noche fresca.
Y no había siquiera templos mediantes. Supimos
el nombre de nuestros dioses: "ninguno".

Hasta ahora, su trabajo como crítico literario me ha gustado más.

Remarque

La novela "Sin novedad en el frente" fue regalo de C., como simbólica despedida de A Coruña. Hacía mucho tiempo, todavía en México, comencé a leer la novela. Sin embargo había una palabra que me detenía, de pronto, sin poder seguir leyendo más allá del primer párrafo. La palabra era "judía", refiriéndose a algo que daban en el rancho.

Para mí la palabra "judía" no entraba en ese contexto. Era como si apareciera byte en un texto de horticultura. Me resultaba inaceptable su polisemia: no podía visualizar soldados alemanes en la primera guerra mundial comiendo ejotes (judías verdes).

Cuando C. me regaló el libro, lo primero que hice, sin entender muy bien por qué en ese momento, fue leer el primer párrafo. Esta traducción usa la palabra "alubia". Eso sí lo podía visualizar. Era un texto que no me echaba fuera.

Esta situación me hizo tomar consciencia de la importancia en las minucias en la traducción literaria. La traductora de esta edición es Judith Vilar, catalana que traduce del alemán al castellano y català. Googleándola, me entero que hay una investigación sobre su trabajo en la obra de El Perfume, de Süskind. Ese es un texto sumamente complicado de traducir por su lenguaje "olfativo".

"Sin novedad en el frente" me gustó mucho. No dejo de pensar en detalles que narra. Me impresionó la historia de las "ratas de cadáver"; la venganza contra su instructor militar, Himmelstoss; la humillación a su profesor de instituto, Kantorek, quien los incitó a alistarse en el ejército; el hospital, o los días de permiso, cuando Paul vuelve a casa de sus padres.

Nido de ametralladora alemán

Nido de ametralladora alemán (fuente).

Pienso en la Primera Guerra Mundial, a la que se opuso Rosa Luxemburgo, y que terminó sus días en la cárcel. La Alemania que prometía comenzar la Gran Revolución Socialista en Europa, a la cual se uniría luego la Rusia zarista, viró hacia los intereses de la burguesía para entrar a una guerra, que según ellos terminaría en cuestión de días, y se alargó por cuatro cruentos años, dejando a Alemania colapsada. Rusia tuvo que hacer su revolución por sí misma. Como siempre, una guerra movida por intereses capitalistas donde mueren jóvenes proletarios.

Pienso en las distancias entre la obra de Bek y la de Remarque. Bek cuenta la guerra como el gran sacrificio en defensa de la madre patria; Remarque como la enloquecida sangría sin motivo.

  1. Manual para mujeres de la limpieza. Lucia Berlin. (12/17/2017 - 01/01/2018)
  2. Arraianos. Xosé Luís Méndez Ferrín. (01/01/2018 - 01/28/2018)
  3. El palacio azul de los ingenieros belgas. Fulgencio Argüelles. (01/28/2018 - 02/09/2018)
  4. La carretera de Volokolamsk. Alexandr Bek (02/10/2018 - 02/13/2018)
  5. Capitalismo Gore. Sayak Valencia (02/11/2018 - 05/08/2018)
  6. El órgano de la risa. Heriberto Yépez (05/08/2018 - 05/31/2018)
  7. Sin novedad en el frente. Erich Maria Remarque (06/01/2018 - 06/10/2018)