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Quebec y la monstruosidad familiar

Tiempo de lectura estimada: 6 minutos

Víctor Jáquez

Llueve desde la mañana, como ha llovido desde la víspera. Una DANA, dicen. Ya fueron demasiadas. No recuerdo otro año tan mojado como éste en todo mi tiempo en Galicia. Estoy comenzando a hartarme de la humedad, del río desbordado, las paredes con salitre, del frío que se cuela hasta los huesos sin importar cuánto abrigo uno se ponga.

Hay varios temas que se han acumulado en el tintero a los que daré salida en esta entrada, aunque sin mucha relación entre sí: el viaje a Montreal y el reporte de las últimas lecturas.

Quebec

A principios de mes estuve en Canadá. Montreal, Quebec, para ser más precisos, para la GStreamer Conference, seguida de la XDC. Mi plan de pasar la primera semana como vacaciones se fue al traste en mi afán de tener una demo del encodificador de H.264. Así que, de las casi dos semanas, sólo uno días sueltos me sirvieron para pasear un poco, e ir también a la ciudad de Quebec.


Silueta urbana de Montreal

Silueta urbana de Montreal desde el Kondiaronk Belvedere, en Mont Royal


Grafiti de Leonard Cohen

Grafiti de Leonard Cohen.


Partido de hockey

Partido de hockey: Toronto vs. Montreal.




senderos de Mont Royal

Senderos de Mont Royal en otoño.

La familia es el monstruo bajo la cama

Por casualidad leí dos novelas seguidas, ambas orbitando el mismo tema: la familia, aunque con ópticas diametralmente opuestas. Primero leí la famosa novela de la argentina Aurora Venturini, Las primas, para luego leer una novela autoeditada, cuya autora es madre de una compañera de trabajo: Una vida de novela. Mi colega es griega, pero su madre nació en Chile, quien, con el golpe de Pinochet, migró a Grecia, donde ya había estudiado. La novela es sobre su madre, Yolanda. Coincidentemente, Venturini también migró a Europa tras el golpe que derrocó a Perón en 1955, pero retornó en los años ochenta.

Con Las primas, su sexta novela, Venturini cobró reconocimiento multinacional a los ochenta y cinco años de edad, al ganar el premio Nueva Novela de Página/12.

Aurora Venturini

Aurora Venturini (origen).

Las primas es narrada, en primera persona, por Yuna López, durante su paso de la infancia a la adultez. Bien podría ser una bildungsroman (novela de formación), donde una niña, que dice parecerse al Retrato de una mujer con corbata, de Modigliani, se convierte en una pintora reconocida, con y a pesar de su familia, a la que describe como un grupo de mujeres (familia, en sentido organizativo, sólo puede ser matrilineal, aunque su etimología sea absolutamente patriarcal —esclavos propiedad del amo—) con un alto déficit cognitivo, emocional y físico; por ejemplo y en particular, retrata a su hermana Betina como un ser deforme y repulsivo. Los hombres en la novela son seres humanos normales en apariencia, a diferencia de ellas, mas irrumpen con violencia en la familia, causando su desgracia. Me recuerda a La casa de Asterión, de Borges, o la novela Soy leyenda, de Richard Matheson, dónde los héroes son presentados como crueles asesinos ante los ojos del supuesto monstruo. Es la prima Petra, enana adolescente, quien aprende a controlar y sacar provecho de la oprobiosa naturaleza masculina a través de la prostitución, volviéndose la protectora de Yuna.

La prosa de Venturini busca ser fiel a la deficiencia intelectual de la narradora, por lo cual tiene faltas de ortografía, errores de redacción y constantes explicaciones de lo difícil que le es escribir y porqué lo hace a pesar de todo. Este estilo me obliga a preguntarme si Las primas influyó a Cristina Morales en su aclamada novela Lectura fácil.

Por otro lado, la novela de Marta Henríquez-Dimintriou, Una vida de noveal es un artefacto literario mucho menos ambicioso. Es la vida de Yolanda Quevedo, contada en tercera persona, aunque el narrador es muy cercano, a los ojos de Yolanda, una niña, en el Chile de principios del siglo XX, que quedó huérfana, junto con sus cinco hermanos, siendo todos muy pequeños. El monstruo familiar es la muerte de los padres y su abuela paterna Ofelia, obligada a adoptarlos. Ofelia no siente ninguna obligación por sus nietos, hijos de un hijo del que jamás se preocupó (la familia —como núcleo social— sólo es matrilineal, al contrario de la herencia, que se reparte por la línea paterna) así que se deshizo de los nietos como pudo, imponiendo crueles destinos a casi todos, a excepción de la protagonista. A Yolanda la dejó con doña Juana, quien se apiadó de la pequeña que iba a ser enclaustrada en un convento. Doña Juana es una matriarca, del mundo rural, que saca adelante a sus hijos y ahijados. La complejidad de la obra está artificialmente en la cantidad de personajes que aparecen y conforman el árbol genealógico de la protagonista, y por ende de la autora, personajes que dibujan el Chile vigesímico.

Dialéctica Cultura-Naturaleza

La última novela que leí fue This is how you lose the Time War, escrito a dos manos, por Amal El-Mohtar y Max Gladstone.

Amal El-Mohtar y Max Gladstone.

Amal El-Mohtar y Max Gladstone (origen).


Es una novela poética—epistolar de ciencia ficción, con mucha filosofía. Soy un pésimo lector en inglés, así que de lo normal que pierdo al leer en castellano, en inglés se triplica. Pero con todo y mis limitaciones, la disfruté.

Es una guerra en los pliegues del tiempo y el espacio, entre dos organizaciones: The Agency y The Garden. Las protagonistas son guerreras de élite de cada una: Red (combatiente de The Agency) y Blue (combatiente de The Garden), quienes se comienzan a comunicar a través cartas entregadas de manera esteganografiada, cada vez más impresionantes. De esa correspondencia surge el amor y las sospechas de sus superiores.

Para mi The Agency corresponde al progreso, la técnica, la cultura desarrollada por el humano. The Garden es la naturaleza, aquello que surge sin intervención humana. Esta dialéctica, tan problemática para la antropología, se representa aquí como la lucha que no tiene límites tiempo-espaciales. Pero es el amor entre sus mejores guerreras lo que puede definir el resultado de ese combate eterno.


  1. Materia. Yolanda Castaño (02/05/2024 - 02/29/2024)
  2. Enxertos. Dores Tembrás (03/15/2024 - 04/01/2024)
  3. A la busca del tiempo perdido: La prisionera. Marcel Proust (01/08/2024 - 04/03/2024)
  4. La política contra la historia. Mario Tronti (10/27/2023 - 05/19/2024)
  5. Algo supuestamente divertido que nunca volveré a hacer. David Foster Wallace (05/20/2024 - 06/17/2024)
  6. A la busca del tiempo perdido: La fugitiva. Marcel Proust (04/04/2024 - 07/18/2024)
  7. El tiempo perdido. Clara Ramas San Miguel. (06/24/2024 - 07/20/2024)
  8. Tezcatlipoca: Burlas y metamorfosis de un dios azteca. Guilhem Olivier (07/18/2024 - 09/03/2024)
  9. A la busca del tiempo perdido: Tiempo recobrado. Marcel Proust (07/19/2024 - 09/20/2024)
  10. Las primas. Aurora Venturini. (09/01/2024 (?) - 09/25/2024)
  11. Una vida de novela. Marta Herníquez-Dimitriou. (09/21/2024 - 10/17/2024)
  12. This is how you lose the Time War. Amal El-Mohtar & Max Gladstone (10/01/2024 - 10/26/2024)

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